SERMON 26 El poder sanador de Jesús (Mateo 8:1-17)

 Tema:

El poder sanador de Jesús (Mateo 8:1-17)

Exégesis del texto

Mateo 8:1-17 es un capítulo lleno de relatos poderosos que demuestran el

extraordinario poder sanador de Jesús. Comienza con la curación de un

leproso que, en su deplorable estado, se acerca a Jesús con valentía

suplicando misericordia. Jesús toca al leproso e inmediatamente queda

limpio de su terrible enfermedad. A continuación, encontramos la historia

del centurión que le pide a Jesús que sane a su siervo paralítico. El centurión

demuestra una fe notable, creyendo que la palabra de Jesús es suficiente para

efectuar la curación. Jesús alaba la gran fe del centurión y el siervo es curado

a distancia. El capítulo continúa con la curación de la suegra de Pedro, que

estaba enferma de fiebre. Jesús le toca la mano y ella inmediatamente

recupera la salud. El texto también informa de numerosas otras curaciones y

exorcismos, mostrando el poder de Jesús sobre enfermedades y demonios. El

punto central de este capítulo es que Jesús es el Gran Médico y el Mesías

prometido, capaz de curar todas las enfermedades físicas y espirituales. Él

responde a la fe de quienes lo buscan con confianza y reverencia.

Introducción

Amados hermanos y hermanas en Cristo, hoy exploraremos un capítulo

extraordinario en la vida de Jesús, Mateo capítulo 8, que revela el poder

curativo sobrenatural de nuestro Salvador. En este capítulo, somos testigos

de cómo Jesús realiza milagros que van más allá del entendimiento humano,

demostrando su dominio sobre las enfermedades y los demonios.

Comenzamos con la historia de un leproso que se atrevió a acercarse a Jesús,

buscando la cura para su terrible enfermedad.

Seremos testigos de cómo el toque de Jesús transformó la vida de este

hombre, devolviéndole la salud y la dignidad. Luego encontramos la historia

del centurión que demostró una fe extraordinaria al pedirle a Jesús que sanara

a su siervo paralítico. La respuesta de Jesús a la fe de este hombre nos enseña

la importancia de la confianza absoluta en Su poder. Además, veremos la

curación instantánea de la suegra de Pedro y muchos otros milagros que

demuestran que Jesús es el Gran Médico, capaz de curar todas las

enfermedades físicas y espirituales. Que este mensaje nos recuerde el poder

incomparable de Jesús para sanar, restaurar y transformar vidas. Que nuestra

fe se fortalezca al explorar estos relatos de sanidad divina y darnos cuenta de

que en Cristo encontramos la esperanza y la sanación que tan

desesperadamente necesitamos.

Desarrollo del sermón:

I. El leproso sanado (Mateo 8:1-4)

a) La Súplica Desesperada: El leproso se acerca a Jesús en busca de

curación.

b) Referencia Bíblica: Salmo 34:17-18 - "Los justos claman, y el Señor

los escucha y los libra de todas sus angustias".

c) El Toque de Jesús: Cómo el toque de Jesús transforma la vida de un

leproso.

d) Referencia Bíblica: Isaías 53:4-5 - "Ciertamente llevó él nuestras

enfermedades, y llevó él nuestros dolores..."

e) Limpieza Inmediata: El leproso es sanado inmediatamente.

f) Referencia Bíblica: Salmo 103:3 - "Él es el que perdona todas tus

iniquidades; el que sana todas tus dolencias".

g) La Orden del Silencio: Instrucción de Jesús de que el leproso no se lo

dijera a nadie.

h) Referencia Bíblica: Marcos 1:44 - "Y él le dijo: Mira, no digas nada a

nadie..."

II. La extraordinaria fe del centurión (Mateo 8:5-13)

a) La petición del centurión: El centurión pide la curación de su sirviente.

b) Referencia Bíblica: Hebreos 11:1 - "Ahora bien, la fe es la sustancia de

lo que se espera..."

c) Respuesta de Jesús: Jesús alaba la gran fe del centurión.

d) Referencia Bíblica: Mateo 21:22 - "Y todo lo que pidáis en oración,

creyendo, lo recibiréis".

e) Curación a distancia: El sirviente es sanado de forma remota debido a

la fe del centurión.

f) Referencia Bíblica: Lucas 17:6 - "Si tienes fe como un grano de

mostaza, dirás a esta morera: Arranca y plántate en el mar; y te

obedecerá".

III. La curación de la suegra de Pedro (Mateo 8:14-15)

a) Enfermedad de la suegra de Pedro: Tenía fiebre.

b) Referencia Bíblica: Salmo 41:3 - "El Señor lo sustentará en el lecho de

su enfermedad; tú suavizarás su lecho de enfermedad".

c) El Toque de Jesús: Jesús toca su mano y ella queda sana.

d) Referencia Bíblica: Marcos 5:34 - "Y él le dijo: Hija, tu fe te ha salvado;

ve en paz y queda libre de tu maldad".

e) El Servicio Renovado: La suegra de Pedro se levanta y comienza a

atenderlos.

f) Referencia Bíblica: Gálatas 5:13 - "Porque vosotros, hermanos, a

libertad fuisteis llamados. Por tanto, no uséis vuestra libertad para dar

ocasión a la carne..."

IV. Innumerables curaciones y exorcismos (Mateo 8:16-17)

a) El Cumplimiento de las Escrituras: Cómo estas sanidades cumplieron

las profecías.

b) Referencia Bíblica: Isaías 53:4 - "Ciertamente llevó él nuestras

enfermedades, y llevó él nuestros dolores..."

c) La multitud de necesitados: Muchos vienen a Jesús en busca de

curación.

d) Referencia Bíblica: Lucas 6:17-19 - "Y saliendo con ellos, se detuvo en

el lugar llamado Getsemaní..."

e) La Misión de Jesús: Vino a aliviar el sufrimiento humano.

f) Referencia Bíblica: Lucas 4:18 - "El Espíritu del Señor está sobre mí,

por cuanto me ha ungido para predicar buenas nuevas a los pobres; me

ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón..."

g) La promesa de la curación espiritual: Las curaciones físicas apuntan a

la curación espiritual.

h) Referencia Bíblica: 1 Pedro 2:24 - "Al llevar nuestros pecados en su

cuerpo sobre el madero..."

Conclusión

Queridos hermanos y hermanas, al explorar el capítulo 8 de Mateo y ser

testigos de los poderosos milagros curativos realizados por Jesús,

recordamos que servimos a un Salvador compasivo y poderoso. Estos relatos

no son sólo historias del pasado, sino lecciones eternas sobre el carácter y el

poder de nuestro Señor. El encuentro con el leproso nos enseña sobre la

voluntad de Jesús de recibir a los quebrantados por el pecado y la

enfermedad. Su toque transformador es una representación de la gracia

divina que purifica y restaura vidas. La fe del centurión nos desafía a confiar

completamente en el poder de Jesús y a reconocer su autoridad sobre todas

las cosas, incluso a distancia. La respuesta de Jesús a la fe de este hombre

ilustra su disposición a responder las oraciones de aquellos que confían en Él

con todo su corazón.

La curación de la suegra de Pedro nos recuerda que cuando Jesús nos toca,

somos liberados de nuestras debilidades y empoderados para servir con

gratitud. Su toque restaurador nos permite ser instrumentos de bendición en

la vida de los demás. Finalmente, Mateo capítulo 8 revela que Jesús es el

Gran Médico que vino a aliviar el sufrimiento humano, tanto físico como

espiritual. Sus curaciones físicas apuntan a la curación espiritual que Él

ofrece a todos nosotros. Que estas historias de sanación y transformación nos

inspiren a buscar la presencia de Jesús en nuestras propias vidas. Que nuestra

fe sea fortalecida, nuestra confianza en Él inquebrantable y nuestro servicio

motivado por el amor y la gratitud por lo que Él ha hecho por nosotros. En

el nombre de Jesús, el Gran Médico, oramos.